Señor mío y Dios mío, tu fuerza me inspira en esta mañana para ponerme en pie, para respirar de nuevo, tomar aire y salir a vivir este nuevo día. Quiero que mi cotidianidad esté permeada por Ti. Que, incluso, en los momentos más pequeños sepa apreciarte, encontrarte y saberte cerca de mí. Cada momento de este día será determinante para mí. Debo tomar decisiones, debo pensar en mi futuro, pensar en cómo estoy construyendo mi vida, qué cosas me están marcando hoy y, a partir de eso, aprender un camino hacia el bien, hacia lo bueno. Dame sabiduría para tomar decisiones que vayan en pro de mi realización personal. Que mi proyecto de vida esté enfocado siempre en hacer el bien a los otros, y que la compasión sea mi principio de acción. Que no pase yo por encima de nadie, sino que pueda ayudar a los demás a que realicen sus vidas, a que cumplan sus sueños en la medida de mis posibilidades.
Amén.
Por Alberto Linero✍
No hay comentarios.:
Publicar un comentario